Un preso de A Lama asegura no recordar nada del apuñalamiento de otro interno de origen nigeriano

Santiago Pena Martínez, el recluso de A Lama para quien el fiscal solicitó ayer 29 años de prisión por el asesinato de otro preso, de nacionalidad nigeriana, aseguró en la Audiencia de Pontevedra no recordar nada del apuñalamiento ocurrido el 6 de noviembre del 2006, si bien sí precisó que fue agredido y que se defendió.
El Ministerio Público rememoró que esa tarde víctima y acusado ya habían mantenido previamente una riña que «fue su sentencia de muerte». No en vano, uno de los empleados penitenciarios no dudó en decir que «si soy un preso procuraría no tener problemas con Santiago», al que definió como alguien que «no se deja avasallar por nadie.
No es un interno cualquiera, ya que tiene un liderazgo muy definido». A sus 38 años, Pena lleva desde los 16 entrando y saliendo de cárceles. Su historial acumula 27 sentencias por 33 delitos, que podrían aumentar si aceptan las tesis del fiscal y la acusación particular, cuya petición estima que el crimen tuvo tintes racistas por lo que solicita que se aplique una agravante.
Ambas partes también coincidieron en sostener que el Estado debe responder del pago de las indemnizaciones.

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