05 marzo 2008

LOS FUNCIONARIOS DE PRISIONES PREVÉN MOVILIZACIONES PARA DENUNCIAR LA MASIFICACIÓN DE LOS CENTROS

Unos 200 trabajadores de la prisión Tenerife II se volvieron a concentrar hoy a las puertas del centro para denunciar la escasez de plantilla y la "masificación" de la prisión, que actuamente acoge a más de 1.550 reclusos, cuando su capacidad máxima es de 750 plazas. Una situación que se repite en todos los centros de Canarias, según denunciaron.

Los funcionarios de las cuatro prisiones en Canarias prevén iniciar movilizaciones conjuntas después de las elecciones generales para denunciar la masificación en los centros del Archipiélago, que duplican en todos los casos su capacidad, y a la falta de personal para afrontar esta situación.

Así lo indicó hoy el representante sindical, Bernardo Fernández (CSI-CSIF), al término de la concentración realizada hoy por los trabajadores del centro Penitenciario Tenerife II a las puertas de la prisión, que actualmente acoge a más de 1.550 presos, cuando fue prevista para una capacidad máxima de 750 internos.

Una situación de “hacinamiento” que se da en todas las prisiones de Canarias, que se encuentran al doble de su capacidad, indicó el representante sindical, lo que llevará a las organizaciones sindicales a promover movilizaciones conjuntas para denunciar la situación en los centros de Tahiche (Lanzarote), Salto del Negro (Gran Canaria), Tenerife II y La Palma.

Las protestas se iniciarán después de las elecciones, con el objeto de demostrar que detrás de éstas “no hay electoralismo”, sino que se trata de reivindicaciones, que llevan planteando “desde hace mucho tiempo” sin recibir ninguna solución por parte de la administración, indicó.

Unos 200 trabajadores participaron en la protesta convocada por todos los delegados sindicales del centro y que es la segunda que protagonizan en febrero para reivindicar un aumento de las plantillas, que actualmente es de 402 personas –distribuidas en los diferentes turnos- para atender a más de 1.500 reclusos.

Esta concentración se produce unos días después de que dos inspectores de la Dirección General de Instituciones Penitenciarias visitaran el centro “no para aportar ninguna solución, sino para intentar evitar la protesta de hoy”, afirmó Fernández. Así, precisó que, tras más de dos horas de reunión, la “única” propuesta que realizaron ambos dirigentes fue organizar una reunión en Madrid con el subdirector general de personal.

La protesta también ha servido para “desmentir” los datos difundidos por la Dirección General de Instituciones Penitenciarias sobre los incrementos de plantilla con 30 funcionarios en prácticas y 11 interinos a raíz de la primera protesta.

Al respecto, Fernández remarcó que 4 de esos interinos ya estaban desde enero, mientras que la incorporación de 30 funcionarios en prácticas también estaba prevista, si bien indicó que estos se encuentran en periodo formativo y ocupan plazas movibles, lo que significa que pueden ser trasladados a otros centros de la península.

Fernández, en declaraciones a ACN Press, detalló que el centro tiene una de las ratios más altas en número de presos por funcionarios –con una media de dos funcionarios por módulo, teniendo en cuenta la distribución de turnos- y harían falta unos 100 funcionarios más para afrontar la situación.

NÚMERO "IMPARABLE" DE INTERNOS

Lejos de esto, afirmó que las condiciones se pueden agravar a partir de mayo, mes en el que se celebra el concurso de funcionarios de carrera, en el que suelen pedir traslado entre 60 ó 70 empleados “y lamentablemente, esas plazas vacantes no se suelen cubrir”, apuntó el representante sindical.

Fernández indicó que la masificación del centro “es un hecho que nadie niega, ni los responsables administrativos ni los políticos”, pese a lo que lamentó “la solución es ninguna”, mientras que el número de internos “es imparable”.

Una situación que previó no se solucionará ni con la construcción del nuevo centro en San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria), con capacidad para 1.008 plazas, ya que precisó que éstas podrían quedar cubiertas sólo con los más de 1.000 presos de las Islas que se encuentran distribuidos por otros centros penitenciarios de la Península ante la falta de capacidad de los de Canarias. Así, insistió en que estos centros "nacen ya masificados".

El representante sindical apuntó que esta masificación también provoca que se incumpla la normativa sobre la separación de presos en función del sexo, emotividad, edad, antecedentes, estado físico y mental y las exigencias de tratamiento, en cuanto a los penados.

De estas condiciones, en Tenerife II sólo se cumplen la separación entre hombres y mujeres, mientras que se incumple la separación presos primarios y reincidentes, jóvenes de adultos, acusados de delitos dolosos y delitos de imprudencia, o lo que presentan enfermedad o deficiencias físicas y mentales de los que están en un régimen normal del establecimiento.

Asimismo, precisó que para afrontar el aumento de presos en las celdas se han colocado literas, de manera que dos presos comparten un espacio de 6,20 metros cuadrados y 2,50 metros de alto, inicialmente previsto para una persona.

La masificación también introduce mayores condiciones de inseguridad y posibles situaciones de agresiones a los funcionarios, ya que indicó la tensión aumenta cuando en un patio previsto para 100 personas hay más del doble para el mismo personal.

Noticia publicada en Revista Digital San Borondón