29 febrero 2008

Gallizo cree que las plantillas de las prisiones tienen que ser razonables

La directora general de Instituciones Penitenciarias subraya que funcionan los controles ·· Apuesta por la formación para que los reclusos salgan mejor de lo que entran
PONTEVEDRA
La directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, reconoció ayer que la población reclusa española es la "más alta" de los países considerados de nuestro entorno en la Unión Europea.
Gallizo subrayó que en esta legislatura, el Gobierno socialista realizó un esfuerzo "ingente" para dotar al país de nuevas infraestructuras, entre las que se encuentran la apertura de diez centros de inserción social, un centro penitenciario y otros tres que están acabados y que se abrirán cuando pase la campaña electoral de las generales.
La directora general estuvo ayer en Pontevedra en la inauguración de unas jornadas del proyecto Reso de la UE, que aborda la formación de adultos en las cárceles y que tiene en la prisión de A Lama una institución "pionera" en su implantación.
Mercedes Gallizo indicó que para hacer frente a esta elevada población reclusa en España, la Administración sacó una relación de puestos de trabajo en los últimos cuatro años.
En todo caso, tras hacerse eco de las demandas sindicales, concluyó que hay que dimensionar las plantillas de funcionarios, pero, insistió, dentro de lo "razonable".
Respecto a los cuatro reclusos de A Lama que aprovecharon un permiso para no volver al centro, Gallizo mostró su absoluto respeto a las decisiones judiciales.
Precisó que las juntas de tratamiento de los centros mantienen "criterios estrictos" para conceder los permisos, si bien los internos pueden recurrir al juez las decisiones, que fue lo que ocurrió en este caso.
Sobre el incidente registrado en la cárcel de Curtis, en el que varios presos en busca de droga empalaron a otro que volvía de un permiso, lamentó el ataque, si bien remarcó que fueron pillados y que el hecho es una prueba clara de que funcionan los controles de entrada, que en este caso habían retirado el alijo.
La directora general dijo que en España, el 10% de los reclusos son analfabetos, cuando en la sociedad el analfabetismo está erradicado. Por ello, apostó por dar formación a los presos, como establece el proyecto Reso, para que "vuelvan a la sociedad mejor de lo que entraron".
En estos momentos son 17.000 los que reciben formación en España. "Abrid escuelas y se cerrarán cárceles", concluyó parafraseando a Concepción Arenal.

noticia publicada en:
El correo gallego.es