De Juana intenta otro chantaje tras pedir el fiscal el embargo de su piso

El siniestro terrorista José Ignacio De Juana Chaos, autor material de 25 asesinatos y que saldrá de prisión dentro de 16 días, lleva camino de batir el récord «guiness» de huelgas de hambre para intentar desafíar al Estado. Ayer comenzó su tercera protesta de este tipo, después de conocerse que la Fiscalía de la Audiencia Nacional está dispuesta a llegar hasta el final para intentar que de una vez por todas el sanguinario pistolero haga frente a la deuda económica que tiene con sus víctimas.
La actuación del Ministerio Público se produce tras difundirse que De Juana y su mujer, Irati Aranzábal, disponen de un piso en la avenida Carlos I de San Sebastián por el que está pendiente de pago una hipoteca de 360.000 euros, concedida por Caja Laboral, a pesar de lo cual el criminal siempre se ha declarado insolvente.
Fue el colectivo de apoyo a los reclusos de la banda terrorista, Askatasuna, el que a través de un comunicado dio a conocer la decisión de De Juana, que justificó en «la inaceptable campaña mediática y de intoxicación y presión» sobre su familia y él mismo. Además, asegura que «el Gobierno del PSOE está haciendo todos los esfuerzos, con todos los instrumentos que tiene en sus manos, para seguir condenando a Iñaki y a su familia» e impedir que vivan en San Sebastián.
El comunicado no hace referencia, sin embargo, a que en el mismo edificio donde piensa habitar el asesino residen víctimas de la banda asesina.
La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias informó de que ayer el recluso envió una instancia al director del centro penitenciario de Aranjuez, donde está recluido, en el que le comunicaba el comienzo de una «huelga de hambre indefinida» ante el «acoso mediático, judicial y penitenciario al que está siendo sometido».
Desde Prisiones se asegura que a partir de ahora se pone en marcha el procedimiento habitual, que consiste fundamentalmente, y siempre que el preso lo permita, en someterle a exámenes médicos diarios. «Si se detectara cualquier anomalía en su estado de salud hasta el 2 de agosto, se actuaría en consecuencia», señalan en esos medios.
«Llamar la atención»
Otras fuentes consultadas por ABC indicaron que la actititud del asesino «parece más una forma de llamar la atención que otra cosa, una rabieta, entre otras razones porque está a punto de salir de prisión y si continúa la huelga de hambre una vez en libertad es su problema».
Además, la nueva huelga de hambre se vuelve a producir sin que antes ninguno de los colectivos proetarras se haya preocupado por la situación del preso, a excepción de Askatasuna con el comunicado de ayer. «La banda sólo lo tiene en cuenta si puede utilizarlo para sus objetivos; en caso contrario, simplemente lo ignora».
Mientras el terrorista intenta plantear otro desafío al Estado, el objetivo del fiscal del caso, Ignacio Gordillo, es demostrar que ha cometido un delito de alzamiento de bienes consistente en ocultar su patrimonio para no pagar las indemnizaciones a las víctimas, que ascienden a 8 millones de euros.
Fuentes jurídicas consultadas por ABC señalaron que «el etarra ha cometido un claro fraude de ley» para no hacer frente a sus obligaciones y precisaron que en caso de que la Sala acceda al embargo preventivo del piso, De Juana y Aranzábal podrán seguir viviendo en él pero no venderlo.
El escrito del fiscal dirigido a la Sección Primera de lo Penal de la Audiencia Nacional recoge que «habiendo tenido conocimiento a través de diferentes medios de comunicación que Irati Aranzábal, esposa del penado José Ignacio De Juana Chaos adquirió el 11 de julio de 2007 la vivienda sita en la avenida Carlos I número 1, piso 3-D de San Sebastián» se piden una serie de diligencias «por si se hubiera cometido un delito de alzamiento de bienes».
En concreto, se solicita que el registro de la propiedad de San Sebastián certifique la inscripción del citado piso, así como «las sucesivas transmisiones y cargos que la citada vivienda tiene en la actualidad»; el certificado de defunción de la madre del terrorista, que era la anterior propietaria de la casa y que murió el 27 de enero del pasado año; una copia testimoniada del préstamo hipotecario concedido por Caja Laboral; que la Policía investigue la forma de pago del inmueble por parte de Aranzábal, las garantías prestadas para la concesión del préstamo hipotecario y pagos mensuales realizados de dicha hipoteca y, finalmente, «el embargo preventivo y la prohibición de disponer del bien para garantizar su disposición a resultas de la presente ejecutoria». Asimismo, el fiscal pide la deducción de testimonio para que se investigue el delito de alzamiento de bienes en «el órgano judicial territorialmente competente».
Donado en 2004
Esperanza De Juana Chaos, la madre del terrorista, vivió en el mencionado piso donostiarra hasta su muerte, si bien en 2004 la mujer lo había donado a su hija Altamira, manteniendo ella el usufructo.
Pocos meses después de que se produjera el fallecimiento, ésta vendió la casa a la entonces novia del pistolero, que se casó con él el pasado mes de febrero. Para hacer frente a la operación se obtuvo un crédito de 360.000 euros.
Todo apunta a que el matrimonio no tiene régimen de gananciales, pues en caso contrario la parte del etarra podía haber sido ya embargada.
El alzamiento de bienes, según fuentes jurídicas, se produciría en el hecho de que el terrorista renunció a la herencia del piso de su madre en favor de su hermana, si bien luego ésta se lo vendió a su futura cuñada, muy poco tiempo antes de la boda.
De esa forma, ahora la pareja tiene un piso en propiedad y además el terrorista evitó pagar las indemnizaciones a las víctimas.
La decisión de la Fiscalía fue muy bien acogida tanto por las asociaciones de víctimas como por el Gobierno y los principales partidos políticos.
Así, quedaban atrás las fuertes críticas de la oposición al Ejecutivo cuando hace ya más de un año, en plena tregua, el gabinete que preside José Luis Rodríguez Zapatero decidió excarcelar al pistolero, que mantenía una huelga de hambre para exigir su puesta en libertad.

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ABC.es