El Gobierno destina 218.000 euros para visitas a presos fuera de Euskadi

Azkarraga anuncia que no gastará «ni un puñetero duro» en colocar la bandera española

El Gobierno vasco destinará el año que viene 218.000 euros para sufragar los desplazamientos de los familiares de los presos encarcelados fuera de Euskadi, lo que supone un incremento del 2,8% respecto a este ejercicio.
Durante su comparecencia ante la Comisión de Hacienda y Economía del Parlamento vasco, el consejero de Justicia, Empleo y Asuntos Sociales, Joseba Azkarraga, dejó claro que, por contra, su departamento no gastará «ni un puñetero duro» en mástiles para colocar la bandera española en los juzgados vascos.
La partida para visitar a los reclusos -la mayoría de ellos de ETA- en otros lugares de España y Francia es fuente habitual de conflicto. Socialistas y populares la rechazan, a pesar de que el PSE ha apoyado en los dos últimos años los Presupuestos de Ibarretxe. Las ayudas se conceden desde 2003. El año pasado fueron 212.000 euros y en 2006, 204.000.
Durante el debate celebrado ayer, la portavoz del PP, Esther Martínez, también interpeló al consejero sobre el dinero que destinará a la aplicación de la Ley de Banderas, que insta a las Administraciones a colocar la enseña española en sus sedes. De forma contundente, Azkarraga anunció que en las Cuentas del próximo año «no hay un puñetero duro para poner un mástil de bandera en ningún juzgado del País Vasco». En este sentido, lamentó que esta sea «la gran preocupación» de los populares.Martínez calificó los presupuestos de 2008 de «continuistas y partidistas» y criticó los «tics totalitarios» del Ejecutivo autónomo.
El consejero respondió que «cualquier polémica de este tipo es artificial» y pidió a la representante del PP que retire esta acusación porque su formación «está deslegitimada» para ello ya que, según indicó refiriéndose a Mayor Oreja, «uno de sus miembros» aseguró recientemente que «vivían plácidamente en el franquismo». Además, Azkarraga anunció que financiará con 1,2 millones de euros actuaciones como el Plan de Educación para la PazItziar Basterrika (EHAK), por su parte, se interesó por la existencia de alguna partida relacionada con la política penitenciaria. En su respuesta, el consejero denunció que el Gobierno central «sigue diseñando cárceles en el País Vasco sin consultar» al Ejecutivo autónomo y siguiendo un modelo que Euskadi «no comparte» por cuanto «repite errores anteriores» al apostar por las «macrocárceles».

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