Cinco anillos de alambradas en la nueva cárcel evitarán las fugas

Mercedes Gallizo y González Tovar, en el centro, visitan las obras en Campos del Río

La prisión de Campos del Río permitirá traer a 1.200 reclusos murcianos de otros centros y combinará modernas medidas de seguridad con instalaciones como piscina y talleres de cocina

El delegado del Gobierno, Rafael González Tovar, y la secretaria general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, presentaron ayer las características de la nueva cárcel Levante I, emplazada en Campos del Río. El centro estará finalizado en 2010 y durante su construcción empleará a unos 500 trabajadores. Asimismo, dará también salida laboral a 500 funcionarios de la Comunidad Autónoma una vez que esté concluido. Además, con 1.008 celdas y 16 edificios residenciales, entre los que se ubicarán un auditorio, una piscina, campos de deporte y talleres de cocina, la edificación tendrá las últimas novedades en materia de seguridad.

Según señaló González Tovar, el complejo dispondrá de cinco anillos con vallas alambradas perimetrales para evitar la fuga de los presos y será la primera infraestructura del país que recogerá la ampliación de las celdas, que pasarán de ser de diez metros cuadrados a trece. El delegado subrayó que una de las mayores aportaciones que este nuevo centro hará a la Comunidad, además de reactivar la economía de la zona, "será la de permitir que los 1.200 internos naturales o con residencia en Murcia que en la actualidad cumplen condena fuera de la Región, puedan hacerlo en su tierra, junto a sus familiares".

Sangonera la Verde. Finalmente, la apertura de la infraestructura, financiada y aprobada por el Gobierno central en 2005, aliviará la situación de la cárcel de Sangonera la Verde. No obstante, ésta, según Gallizo, continuará abierta para así trabajar con más medios en la reinserción y reeducación de personas que han cometido algún delito de gravedad.

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